Un poco de melodrama para este viernes de otoño. Ojo de Buey los invita a disfrutar de la última película de Pedro Almodóvar.
Los Abrazos Rotos viernes 23 de abril 20:30hs
Dirección y guión: Pedro Almodóvar. País: España. Año: 2009. Duración: 130 min. Género: Drama. Interpretación: Penélope Cruz (Lena), Lluís Homar (Mateo Blanco/Harry Caine), Blanca Portillo (Judit García), José Luis Gómez (Ernesto Martel), Rubén Ochandiano (Ray X), Tamar Novas (Diego), Ángela Molina (madre de Lena), Chus Lampreave (portera), Kiti Manver (Madame Mylene), Lola Dueñas (lectora de labios), Mariola Fuentes (Edurne), Kira Miró (modelo), Rossy de Palma (Julieta), Alejo Sauras (Álex). Producción: Esther García y Agustín Almodóvar. Música: Alberto Iglesias. Fotografía: Rodrigo Prieto. Montaje: José Salcedo. Diseño de producción: Antxón Gómez. Vestuario: Sonia Grande. Estreno en España: 18 Marzo 2009.
Sinopsis: Un hombre (Lluís Homar) escribe, vive y ama en la oscuridad. Catorce años antes sufrió junto a Lena (Penélope Cruz), la mujer de su vida, un brutal accidente de coche en la isla de Lanzarote que lo dejó ciego. Este hombre usa dos nombres, Harry Caine, lúdico seudónimo bajo el que firma sus trabajos literarios, relatos y guiones y Mateo Blanco, su nombre de pila real, con el que vive y firma las películas que dirige. En la actualidad, Harry Caine vive gracias a los guiones que escribe y a la ayuda de su antigua y fiel directora de producción, Judit García (Blanca Portillo), y de Diego (Tamar Novas), el hijo de ésta, secretario, mecanógrafo y lazarillo. La historia de Mateo, Lena, Judit y Ernesto Martel es una historia de amour fou, dominada por la fatalidad, los celos, el abuso de poder, la traición y el complejo de culpa.
Crítica: "Los abrazos rotos" es un formidable gazpacho cinéfilo de melodrama puro -y noir- a lo Douglas Sirk, pizca de Fassbinder, y parte de Cassavetes, aderezado del humor único y genial en este manchego universal -que diría el tópico-. Aunque aquí de tópicos, nada. De nuevo Almodóvar hace estallar ante nuestros ojos algo único, otro relato casi hipnótico filmado en estado de gracia, compuesto por una multitud de pequeños detalles que habitan, a ratos de forma magistral, una historia de amor, pérdida y culpa atemporal. A la altura de sus obras mayores, aunque sin alcanzar momentos de emoción deslumbrante, el cerebro de este director singular compone colores, encuadres y diálogos para crear su peculiar arte en la pantalla, manejando contenido, tiempo y espacio bajo una estricta voluntad. Y de nuevo, acompañando la brillantez de su guión y dirección, unos personajes centrales colosales (sin palabras para las recreaciones de Homar y Cruz), y una colección de secundarios de gran fuerza e intensidad, que parecen tener un pasado y un futuro antes de asomarse ante nuestras pupilas. Pasión (algo fría), dolor y comicidad vuelven a alternarse de forma natural consiguiendo conquistar cada fotograma, para terminar todos fundiéndose en un conjunto que arrebata por la propia esencia de la propuesta: "ser" un film de Pedro Almodóvar. Esencia que el realizador -en un nuevo ejercicio de ego, eso sí- deja clara en unos títulos de crédito iniciales donde sólo aparece su nombre. (Pablo Kurt: FILMAFFINITY) |
|
Nuk ka komente:
Posto një koment